En el sur de Madrid, Butarque fue testigo de una batalla cargada de urgencias y emociones entre dos equipos con destinos distintos pero un mismo anhelo de victoria. El Leganés y CA Osasuna firmaron un empate 1-1 que, aunque repartió los puntos, dejó más sensaciones de incertidumbre que de celebración. El encuentro, parejo y a ratos trabado, reflejaba el miedo a perder más que la ambición por ganar. En la primera mitad, los porteros casi no tuvieron trabajo; el respeto mutuo era palpable en el ambiente. Sin embargo, el descanso trajo consigo un cambio de guion. Osasuna salió con mayor intensidad y rápidamente encontró recompensa. Apenas iniciado el segundo tiempo, en el minuto 49, Jorge Herrando saltó al cielo en un saque de esquina y conectó un cabezazo imparable que puso en silencio a las gradas de Butarque. La afición local temía que una nueva derrota se asomara en el horizonte. Pero entonces, el Leganés, tocado pero no derrotado, se rehizo. Fue un joven de 18 años, Yan Diomande, quien cambió el rumbo del partido. Con una frescura inusitada, el delantero entró desde el banquillo y agitó el juego. A tres minutos del final, Diomande se internó en el área con velocidad, y su acción provocó un penalti que despertó la esperanza de los locales. Dani Raba, con nervios de acero, asumió la responsabilidad y no falló. Empate. Respiro. El Leganés no solo rompió una racha de tres derrotas seguidas, sino que recuperó un poco de orgullo. En cambio, Osasuna sigue sin encontrar la victoria que le acerque a Europa: ya son ocho jornadas sin ganar. En el Estadi Olímpic Lluís Companys, el Barça dejó escapar una oportunidad de oro para distanciarse en la lucha por el título al empatar 1-1 contra el Betis. El encuentro comenzó con buen pie para los culés, que se adelantaron a los 7 minutos con un tanto de Gavi tras una gran asistencia de Ferran. Parecía que el Barça tenía todo bajo control, dominando el juego y generando ocasiones. Pero, a los 17 minutos, Natan empató para el Real Betis con un cabezazo preciso tras un saque de esquina ejecutado a la perfección por Lo Celso. A partir de ahí, el guion se repitió: dominio de balón del Barça, pero sin la capacidad de materializar las ocasiones. El Betis, por su parte, se defendió con orden y fortaleza, y Adrián San Miguel se erigió como héroe con varias intervenciones claves, incluida una parada a bocajarro a Koundé que evitó el 2-1. Con este empate, el Barça mantiene el liderato, pero su ventaja sobre el Real Madrid se quedan en cuatro puntos. El Betis, por su parte, se lleva un punto valioso en su lucha por los puestos europeos, demostrando que sigue siendo un rival difícil de superar para los grandes y que peleará hasta el final por entrar en Champions. Borja Jiménez tiene lesionados a Barisic y Franquesa. Hansi Flick recupera a Iñigo Martínez y Christensen, aunque tiene lesionados a Casadó, Ter Stegen, Marc Bernal y Dani Olmo.