RCD Mallorca y Deportivo Alavés firmaron un empate 1-1 en Son Moix en un partido intenso que dejó una mezcla de sensaciones en ambos equipos. Los locales comenzaron con fuerza y se adelantaron pronto en el marcador gracias a Takuma Asano, quien en el minuto 9 aprovechó un balón suelto en el área para batir a Antonio Sivera. Más allá de la importancia del gol en el desarrollo del partido, el tanto de Asano adquirió un valor histórico, ya que significó el número 500 del Mallorca en Son Moix, un hito que llega 26 años después del primer gol mallorquinista en este estadio. El equipo dirigido por Jagoba Arrasate intentó ampliar su ventaja, espoleado por su afición, pero el Alavés supo mantenerse firme en defensa y esperó su oportunidad. Esta llegó en la segunda mitad, cuando un remate en semifallo de Carlos Martín terminó en los pies de Kike García. El delantero, con su instinto goleador intacto, no perdonó y puso el 1-1 en el minuto 68, sumando su undécima diana en la presente temporada. Tras el empate, el Mallorca trató de volver a adelantarse en el marcador, pero el Alavés se mostró sólido y logró resistir los intentos locales. Al finalizar el encuentro, Arrasate reconoció que el resultado les dejó "un poco fríos", ya que sintieron que pudieron haber conseguido más. Con este empate, el Mallorca mantiene vivas sus aspiraciones de acercarse a la zona europea, aunque sigue sin lograr una victoria que le impulse definitivamente en la clasificación. Por su parte, el Alavés suma un punto valioso en su lucha por alejarse de la zona de descenso. Por otro lado, el Villarreal no pudo disputar su partido contra el RCD Espanyol debido al temporal que azotó Castellón, lo que obligó a la suspensión del encuentro. Coudet tiene lesionados a Conechny, Hugo Novoa, Owono y Benavidez. Marcelino tiene lesionados a Gerard Moreno, Akhomach y Kiko Femenía.