Hay un Principio del Patrón que dice que el dinero debe estar en el campo, debe estar invertido en fichajes con el fin de alinear cada jornada el mejor 11 posible, que habitualmente coincide con los jugadores con un valor de mercado más alto.
Lo mismo ocurre con los equipos, que normalmente suelen funcionar mejor cuando los jugadores con más calidad están sobre el terreno de juego. Es cierto que, a veces, estos jugadores con mucha calidad adolecen de cierta capacidad de sacrificio y los entrenadores deben darles un toque de atención.
Algo así ocurre con el Girona y con RODRIGO RIQUELME, que ha vuelto a asentarse en la titularidad del Girona después de una época pre mundial en la que dejó muchas dudas, culminadas con suplencias y muchas dudas fantasy.
Ahora está aprovechando la oportunidad que le ha dado Míchel y está volviendo a desplegar toda su magia sobre el césped con el conjunto gironí. Está trabajando en ambas partes del campo y, en la ofensiva, está de nuevo desplegando toda su magia, como se pudo ver en el partido contra el Espanyol.
El valor de poco más de 3 millones hace que pueda ser un buen momento para su compra. Ahora puede haber ligas que se reinicien y haya que montar equipos de 0, y está en un valor que puede cuadrar tanto en equipos que se tengan que construir de 0 como en equipos ya construidos a los que se vaya mejorando para terminar la temporada de la mejor forma posible.
Sabemos que no se ha lesionado, pero sí que ha pasado por una época de ostracismo y de estar relegado a un segundo plano que duele mucho para futbolistas de su calidad (pero que puede ser un buen toque de atención para no perder la perspectiva de que todo hay que ganárselo, no solo en el fútbol sino en la vida).
RIQUELME parece haber aprendido la lección y está de vuelta. Ha vuelto el sheriff de Girona, el patrón de Míchel, RODRIGO RIQUELME.