Más de 130 minutos de sufrimiento para terminar con una explosión de júbilo. Miles de personas se agolparon en las calles del casco viejo para celebrar que el Glorioso estará el año que viene en Primera. “Villalibre, Villalibre...”, “a Primera, oe, oe...” o, directamente, el himno, fueron las canciones más entonadas en la calle Cuchillería de la capital alavesa. La gente, de todas las edades, sudaba, se abrazaba, se mojaba por dentro y por fuera mientras comentaban donde habían visto el partido y como habían sufrido con la decisión del VAR y el lanzamiento de la pena máxima.