
En el Deportivo no había sentado nada bien la pasada semana la designación arbitral para el partido de Anduva, en gran parte por las recientes protestas al CTA con varias polémicas. Los elegidos fueron Muresan Muresan, que regresaba tras su paso por la ‘nevera’, y un Ais Reig en el VAR de nefasto recuerdo para los blanquiazules por su arbitraje en 2018 en El Arcángel con la triple expulsión de Pablo Marí, Borja Valle y Natxo González. El resquemor preventivo se transformó en enfado al término del encuentro ante el Mirandés (2-2) por varios motivos.