Corpas pide una ronda más

Ipurua ha recuperado su mística. Hace cerca de tres meses que no era capaz de vencer como local y desde que Beñat San José ha cogido las riendas del equipo, está invicto. Además del guipuzcoano, José Corpas tiene gran culpa de ello. El jiennense, nuevamente de extremo, es una máquina de producir en la banda derecha. Tras asistir a Bautista en el primero, se bastó de si mismo para ampliar la renta y certificar los tres puntos en su feudo. El joven Willy recortó distancias al poco de terminar, pero la reacción visitante fue insuficiente para arrebatar al Eibar de su ilusión por volver a estar en la pomada. Todavía les queda un largo camino por delante. Unos siete puntos, para ser concretos. Distancia que guardan con un Huesca, que se marcha de vacío en su lucha por el ascenso directo. Después de tres derrotas consecutivas, las eliminatorias de ascenso pueden ser su mejor arma.

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