El Castellón ha descubierto de golpe y porrazo que es la Segunda División. El equipo albinegro, tras firmar una seria primera parte ante un claro candidato al ascenso, se desconectó en los primeros diez minutos de la segunda mitad y lo acabó pagando muy caro. Chris Ramos con dos goles y la provocación de un penalti decantó la balanza claramente a favor de un Cádiz que acabó guardando la ropa para sumar sus primeros tres puntos de la temporada.