Los Timberwolves dejaron escapar un partido que tenían más que controlado. Nueve minutos y medio sin encestar ni un tiro de campo y claro, las cosas se complican. El bajón fue espectacular contando además con lo que se están jugando en la Conferencia Oeste, la contraria a la de sus verdugos de Milwaukee, en una zona media entre el tercer y el octavo puesto donde esta estrepitosa caída tiene el efecto de una bomba atómica.