Empate y gracias para el Sevilla, al que los resultados le quitaron hace tiempo el traje de aspirante y ahora se dedica a mirar no ya hacia Atlético y Barcelona, perseguidores en el segundo puesto, sino incluso a los que vienen por detrás con ganas de dejar a los de Nervión sin una de las cuatro plazas Champions de la próxima temporada. De momento, el equipo de Lopetegui sobrevivió a un vendaval de la Real Sociedad en el segundo tiempo para mantener la igualada y la distancia en la clasificación (9 puntos) con el equipo txuri-urdin y siete con el Betis, eterno rival que también había conseguido solo un punto en Balaídos.
Agradecerá el parón como agua de mayo, como el diluvio que inundó el césped en la primera mitad, un Sevilla exhausto y que acude casi siempre a los partidos con un montón de bajas. Ahora mismo: Diego Carlos, Rekik, Acuña, Papu, Fernando, Rafa Mir y Suso. Un parte que además en los últimos tiempos suele
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