Ni el esperado retorno de Darder al RCDE Stadium 14 meses después de su amargo adiós, ni la entrada de los jugadores del Espanyol al terreno de juego acompañados por 11 perros necesitados de una adopción; amores perros. Ingredientes había de sobra. Pero lo que convirtió en histórico el Espanyol-Mallorca fue la obra de Jofre, autor de un gol y de una asistencia. Y una sobresaliente primera parte de los pericos, que venían de teres derrotas, igual que los bermellones enlazaban tres triunfos. Histórico, sí, porque alcanza el Espanyol las 1.000 victorias en Primera. Toda una hazaña, 95 años después, para el club de la resistencia.

