Oier se queda fuera de la línea de Osasuna

El jugador rojillo pierde fuelle tras rendir a un gran nivel en las primeras jornadas

En todos los equipos hay jugadores que pasan por rachas, algunas de ellas inesperadas y otras más lógicas. Cuando llegan los malos momentos hay que pensar seriamente en la venta.

El defensa de Osasuna ha ocupado una posición en el centro del campo desde el arranque del campeonato, pero con el paso de las jornadas ha ido a menos, a lo que hay que sumar que el pasado fin de semana fue expulsado en el duelo ante el Sevilla. El jugador rojillo, que incluso le marcó un gol al Valencia en El Sadar, podría terminar perdiendo el puesto y puede ser mejor venderlo ahora, que tiene un buen valor de mercado.

El delantero mexicano no está teniendo demasiadas oportunidades, pero lo cierto es que las que está teniendo no las está aprovechando. El pasado fin de semana pasó desaparecibido en el duelo ante Osasuna, que frenó a los hispalenses a pesar de jugar con un hombre menos durante media hora. La preferencia de Lopetegui por De Jong y la aparición en los últimos choque de Dabbur invitan a su venta.

Segundas partes nunca fueron buenas, o eso dicen. Lejos está el brasileño de ser aquel jugador desequilibrante que encandiló al fútbol español en su primera etapa como celeste. La discontinuidad por culpa de las lesiones y la irregularidad del cuadro vigués no han dejado ver aún la mejor versión del jugador cedido por el Barcelona. Mucha paciencia hay que tener para no venderlo aún.

El centrocampista del Mallorca comenzó el campeonato como uno de los sostenes del cuadro balear, realizando un gran trabajo defensivo en el centro del campo bermellón. Sin embargo, en las últimas jornadas está dejando bastante que desear, teniendo demasiadas pérdidas y no siendo tan determinante en el juego del cuadro de Vicente Moreno. Su valor no es bajo y darle salida puede ser la mejor opción a día de hoy.

Aunque el centrocampista es uno de los jugadores más destacados del Eibar en esta primera mitad de Liga, su expulsión y el fin de una racha goleadora, unido a su elevado valor de mercado, hacen necesario reflexionar sobre su permanencia en las plantillas de los mánagers de Biwenger.