La vuelta del patrón: Jeremías Ledesma

Decía uno de los máximos representantes de ese género artístico que se lleva por bandera en Cádiz, la chirigota, “soy un bárbaro señores, no lo puedo remediar, porque Cádiz es una barbaridad”, y nuestro protagonista de hoy también es un bárbaro de los de cómic, además.

El arquero del país del Río de la Plata se ha ganado el cariño de todo aficionado al fútbol en la tacita con ese ímpetu y ese derroche de energía que deja en todos los partidos es santo y seña del club cadista. No duda en dejarse la piel por su club, ya sea por detener lo que parece un gol cantado como darse una carrera para ayudar a un aficionado.

JEREMÍAS LEDESMA, Conan (el Bárbaro), es un arquero que ha entendido la idiosincrasia del club gaditano a la perfección: los valores de su gente, el sacrificio de su equipo y la pelea en el verde no se negocian.

Seguramente, el hecho de que el Cádiz siga vivo hoy en la pelea por evitar el descenso es mérito del portero argentino que, aunque ha cometido algunos errores de bulto, ha tenido un rendimiento sobresaliente esta temporada.

Tras 4 partidos de sanción, volvió en la última jornada como mejor sabe hacerlo, con 3 picas y un punto de vuelta de Barcelona para seguir vivos en la lucha. Un valor de mercado de poco más de 5 millones de euros hace que sea uno de los arqueros más caros, pero que tiene un nivel de puntuación también muy alto, por lo que puede ser una opción muy interesante para este tramo final, en el que el club amarillo se juega la vida.

Tras un rendimiento más que aceptable de su sustituto DAVID GIL, el dueño de la portería cadista tiene nombre y apellidos: JEREMÍAS LEDESMA. O Conan, el Bárbaro. O para nosotros, el PATRÓN. No hay dudas, ha vuelto el muro argentino gaditano.